Guía
monumental (arte e historia) de Alcora, Castellón
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Alcora |
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Castellón |
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Alcalatén |
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Introducción
a la guía de arte (monumentos y rutas) de Alcora, Castellón
Alcora,
en valenciano L'Alcora, es un municipio de la provincia de
Castellón en la Comunidad Valenciana y capital de
la comarca del Alcalatén. Está situado a 19 kilómetros
de Castellón. Alcora es uno de los principales centros de
industria cerámica de la provincia especialmente dedicada
a los pavimentos y revestimientos, contando con más de sesenta
factorías azulejeras en su término municipal y contando
con su propio Museo histórico sobre cerámica. El número
de sus habitantes es de 10.297 personas.
Los restos humanos más
antiguos que se han encontrado en la zona son de la Edad de Bronce.
Mucho más importante en Alcora es la presencia de la cultura
ibérica como demuestra la arqueología de los poblados
de Montmirà y el Tossal de les Foies. De época romana
todavía hay vestigios en las partidas de Montmirà,
la Pereta y la de Santa, en este último lugar parece haber
existido un gran asentamiento rural de época imperial y se
han encontrado también unas termas, entre otros restos.
Monumentos
de Alcora. El Casco Urbano
El casco antiguo de la localidad
es muy bonito, merece la pena pasear por sus calles y ver sus monumentos,
como la Iglesia Parroquial de preciosa fachada renacentista, el
antiguo ayuntamiento, hoy Casa de la Música, (siglos XIV-XVII),
o los portales de Marco y Verdera (siglo XIV).
Iglesia
de Nuestra Señora de la Asunción
La iglesia parroquial de
Nuestra Señora de la Asunción está situada
en la calle Iglesia. Su construcción se realizó en
cuatro etapas, en el siglo XV, siguiendo el estilo gótico,
en el siglo XVI, en estilo renacentista, más tarde se construyó
la Capilla Sagrario, en el siglo XVII y en el siglo XIX se finalizó
el tramo de los pies.
La iglesia tiene dos fachadas,
una a los pies renovada en 1901 y la antigua fachada renacentista,
en la calle Iglesia (actualmente Venerable Beltrán) junto
al lado de la epístola, con portada en forma de retablo donde
se ubican las esculturas de la Asunción y dos santos en los
laterales, S. Pedro y S. Juan (hoy inexistentes), resguardadas en
hornacinas. En el interior de la iglesia la bóveda es de
crucería estrellada y nervios de piedra. En las claves del
ábside y bóveda, dispone de florones barrocos policromados
y dorados. La torre campanario fue reconstruida tras la guerra civil.
Iglesia
de San Francisco
La iglesia de San Francisco
e ubica en la plaza de San Francisco, justo a la entrada de Alcora.
Se levantó en el siglo XVII, era la iglesia del antiguo convento
franciscano. En 1977 se cerró al público y se abrió
de nuevo en 1995 tras su restauración. En las capillas del
Evangelio y epístola, adornos y pinturas rocalla (1748 y
1734) respectivamente. Arco presbiteral con pinturas representando
atributos seráficos soportados por dos ángeles. Pila
de agua bendita gallonada (siglo XVIII).
Capilla
Dolores u Oratorio de Marco
La llamativa Capilla Dolores
u Oratorio de Marco está situada en la calle Mayor, y en
la actualidad es el Oratorio del "Hogar de Ancianos Rosa Ojeda",
una residencia para la tercera edad. Se construyó en 1740
para las Carmelitas de San José. La fachada por el lado del
evangelio tiene portada tipo retablo, con el escudo de la familia
de Marco en la parte superior, la puerta de entrada está
enmarcada por pilastras con capiteles dóricos, y coronada
por arquitrabe clásico y frontón semicircular partido
con óculo tapiado. La decoración interior destaca
por sus azulejos del siglo XVIII de la fábrica del Conde
de Aranda.
Iglesia
de la Sangre
La Iglesia de la Sangre
se encuentra en el centro de la antigua aljama judaica de 1'Alcora
construida en 1621, donde estuvo la sinagoga. En el ábside
se puede observar restos de pintura del siglo XVIII, con el tema
de la Pasión y otras decoraciones sobre dibujos de la Fábrica
del Conde Aranda. La fachada principal ha perdido gran parte de
los elementos originales.
La importancia de la cerámica
para la población está ligada a su historia, lo que
se puede apreciar en numerosos puntos del casco urbano. También
empresas e instituciones de Alcora se han ocupado de mantener todavía
hoy moldes, estarcidos y estilos decorativos del siglo XVIII. El
Museo de Cerámica está situado en la calle tejedores,
5, en un edificio de 1907, de tres plantas ofrece un recorrido por
la historia de la cerámica, destacando las piezas de la manufactura
del Conde de Aranda.
En las afueras de la población
podemos visitar varias ermitas interesantes, no en vano hay un "paseo
de las ermitas", el Castillo y hasta un poblado ibérico.
Castillo
de Alcalatén
A dos kilómetros
de la localidad, en la ladera del Monte San Cristóbal, se
sitúa la construcción del Castillo de Alacalatén,
de origen musulmán entre los siglos X y XIII. En su momento
detentó gran importancia, especialmente por su privilegiada
situación ya que domina todo el valle de l'Alcora.
Tiene planta triangular
y una única entrada flanqueada por torreones. Parece que
los extremos de la fortaleza terminaban en torres circulares, y
tenía alguna torre más de planta cuadrada. La muralla
estaba almenada, y se reformó en varias ocasiones en los
siglos XV-XVI. Actualmente se está restaurando.
Ermita
fortificada de San Salvador
La Ermita fortificada de
San Salvador está en la partida Castell, a un par de kilómetros
de la localidad y a los pies del Castillo. Tiene antigüedad
del siglo XIII y se trata de una ermita santuario-fortificado o
"templo de reconquista" de estilo románico-tardío.
Originalmente tuvo almenas, pero hoy se encuentran cubiertas, y
también tuvo murallas defensivas quedando todavía
testimonio de esto. En el siglo XVI se le añadieron nuevos
elementos defensivos. Con el tiempo el edificio quedó destruido,
pero se restauró, aunque perdiendo mucho de su carácter
fortificado, y se volvió a abrir al público en 1969.
Ermita
de San Vicente
A unos 2 kilómetros
del casco urbano. Su datación es de 1598. Es de planta rectangular
con una sola nave y crucero, tiene bóveda de cañón
y la cúpula se sostiene sobre pechinas, tambor y se remata
con una linterna, en el exterior, la cúpula es de azulejos
vidriados. En el interior también hay azulejos en el presbiterio,
de la Fábrica del Conde Aranda. La decoración se completa
con yeserías dieciochescas, esgrafiados y puttis, y cuadros
académicos de escuela valenciana. La sacristía llama
la atención al ser apechinada. Se restauró en 1985.
Ermita
de San Cristóbal
La Ermita de Sn Cristóbal
está situada sobre una colina, aquí se celebran las
fiestas de Santa Lucía y del Rotllo. Se construyó
en el siglo XVII. Se utilizó como fortín en las guerras
carlistas. La fachada es adintelada con frontón decorativo
en la parte superior y un gran óculo para la iluminación,
destacando la torre cuadrada a los pies por el lado de la epístola.
La planta del edificio es rectangular, con coro alto a los pies.
Calvario
Conjunto de edificios fechado
en el siglo XVI o XVII, anterior al Ermitorio de San Cristóbal.
El recinto contiene un Vía Crucis en cerámica del
siglo XVIII del Conde de Aranda, aunque actualmente sólo
cuatro son originales, ya que el resto desapareció tras el
saqueo napoleónico de 1811 y la Guerra Civil.
La
Ermita del Calvario
Tiene gran importancia para
la localidad, se reformó en 1774, ampliando y cerrando el
recinto, dentro se guarda la milagrosa talla del Cristo, del siglo
XVII, atribuida a la escuela de Montañés. La decoración
interior del templo es rococó, del siglo XVIII, en 1975 se
restauró, realizándose una girola tras el antiguo
camarín y se colgaron nuevos cuadros. La cúpula es
central y octogonal, con ventanas y sin linterna y al exterior es
de cerámica vidriada azul. La fachada es mixtilínea
con mural de azulejos representando la crucifixión.
(Autora
del texto del artículo/colaboradora de ARTEGUIAS:
Natalia Molinos Navarro)
