Algunas de
las iglesias del "Primer Románico" de La Lombardía
son:
San
Vincenzo in Prato
San Vincenzo
in Prato es originaria del siglo IX, pero fue reconstruida en
el siglo XI con ladrillo. Tiene tres ábsides, pero con
escalonamiento muy pequeño. Tiene planta basilical de tres
naves.
Está
decorada con una combinación una banda o lesena cada tres
arquillos. Dispone de una galería en torno al ábside
central llamada "galería enana" que será
muy característico en las cabeceras de los edificios. Tenía
cubierta de madera.
COMO
La región
de Como, al norte de Milán es importante por la propagación
que la arquitectura de ésta última tuvo en sus edificaciones
religiosas.
San
Abundio de Como
Construida
entre los años 1012 y 1025. Se trata de un edificio muy
importante, de grandes dimensiones. Tiene 5 naves y una cabecera
muy influida por el arte otoniano, con un solo ábside.
Tiene decoración de arquillos y bandas y está construida
en sillarejo. Aunque tiene una fachada muy importante y bien articulada,
la portada es muy simple, con el tímpano liso. Tiene dos
torres campanario unidas al crucero, de planta cuadrangular y
con vanos que se van ampliando según se aumenta en altura.
La iglesia
de San Abundio datada entre 1013 y 1095 presenta variantes originales.
Se compone de cinco naves, cubierta de armazón y con una
serie de arcadas como división de las naves. En la fachada
se da el orden en dos pisos con un elegante efecto de bandas y
pilastras combinadas. El contraste entre los pilares redondos
en la nave central y las columnas de las naves laterales da gran
originalidad al interior del templo.
La influencia
arquitectónica de esta obra las podemos ver en otras como
San Giacomo en la misma ciudad o en otras como Santa Eufemia en
la Isla Comacina, hoy desaparecida.
San
Carpoforo de Como
En un primer
momento esta iglesia era el templo romano dedicado a Mercurio,
sin embargo con la implantación del Cristianismo se colocaron
en el las reliquias de San Carpoforo y sus compañeros mártires,
Esanto, Cassio, Licinio, Severo y Secondo. Al maestro Liutprando,
de la primera mitad del siglo VII, se le adjudicó la restructuración
a templo católico. Conocemos el dato de consagración
de 1040 aunque son complicadas las dataciones en cuanto a la morfología
constructiva ya que posteriormente se convirtió en cenobio.
Por lo tanto,
el cuerpo basilical podría datarse de la primera mitad
del siglo XI y la cripta y ábside podemos retrasarlo hasta
el siglo XII.
Sin embargo
esta datación plantea algunas dudas puesto que las iglesias
se comenzaban por el ábside a fin de poder celebrar misa
en ellas lo antes posible. El hecho de que fuera un templo anterior
puede llevarnos a pensar que las remodelaciones no se llevaran
a cabo igual que una iglesia de nueva planta.
San
Fedele de Como
La iglesia
se construyó a partir del año 1120. En una primera
fase constructiva se resuelve con planta central de salón,
sin embargo mías adelante se le añade un cuerpo
longitudinal a la parte central. Junto a la basílica
La torre campanario
aneja al edificio sufrió grandes restauraciones tras el
terremoto acaecido en 1117.
San
Vincenzo de Galliano
Es una iglesia
muy sencilla, decorada con bandas y arquillos y construida en
sillarejo, tanto la iglesia como el baptisterio. La iglesia tiene
un ábside semicircular sobre una cripta. La iglesia de
San Vicenzo data, en una primera construcción del año
800. Sin embargo lo que hoy observamos es obra de una remodelación
del año 1007. Esta fue consagrada por el obispo de Milán
Ariberto d´Antimiano, el cual fue nombrado obispo en 1018.
El conjunto está formado por la iglesia y el baptisterio
adosado a ella advocado a San Giovanni. Los elementos románicos
que destacan en el exterior son los arcos del ábside junto
con las lesenas.
Originariamente
la iglesia era de tres naves pero entorno al siglo IX perdió
la nave derecha. Los vanos de la nave central se cerraron en el
siglo XI para poder ampliar el tamaño de las paredes con
el fin de tener mayor espacio para realizar los frescos. El interior
está dominado por el amplio ábside central y el
presbiterio que se alza sobre la cripta. En cuanto a la decoración
son magníficos los frescos románicos que representas
a Cristo o a los arcángeles San Miguel y San Gabriel. Son
destacables igualmente los dos capiteles del arco de entrada a
la cripta.
Santa
María la Mayor de Lomello
La cronología
constructiva de esta iglesia seta entre los años de 1025
y 1050. Se trata de una basílica de tres naves, la central
mas elevada que las laterales. En esta últimas se dan cubiertas
en bóvedas de arista. Sin embargo la central se cubre con
armazón de madera. El material utilizado en su construcción
es el ladrillo, tan típico en estas iglesias de tipo más
rural. Está decorada con arcos y bandas y tiene un baptisterio
en un lateral, de planta poligonal y con absidiolos.
Una serie muy numerosa de edificios, con una cronología
discutida, adoptarán la misma decoración, pero sin
recurrir a grandes complejidades espaciales y mucho menos al abovedamientos
total.
Iglesias como
esta de Santa María Mayor de Lomello y la antigua catedral
de Como, de plena mitad de siglo, todavía mantienen la
decoración referida de su nave central con cubierta de
madera, mientras que el resto se cubre con aristas. Tan sólo
a partir de la segunda mitad de la centuria, se aprecian las soluciones
de la arquitectura monástica cluniacense por ejemplo en
la catedral de Acqui, consagrada en 1067. Sin embargo las influencias
de modelos germánicos no le son ajenas al edificio y se
ven en esta iglesia que nos ocupa y en otros ejemplos como la
de San Pedro en el monte en Civate que cuenta con un doble ábside
contrapuesto.
San
Ambrosio de Milán
La basílica
de San Ambrosio muestra en su segunda reforma, la primera es de
época carolingia, un tipo de edificio que va a ser interpretado
posteriormente en toda la región Lombarda. Aún hoy
existe la duda de la fecha de esta renovación ya que en
1098 se descubren los cuerpos de San Gervasio y Protasio mientras
que en 1117 se produce un terremoto en la ciudad. Las excavaciones
han resuelto que el primer edificio correspondía a una
planta basilical. De él aún podemos ver en el cuerpo
central un poco de basamento. Todo el nuevo edificio se construye
en ladrillo rojo y solamente las columnas, basas, capiteles y
fustes son de piedra blanca.
La planta
del edificio nos plantea la duda de si el abovedamientos estaba
ya planeado antes de comenzar la construcción. En la planta
cada doble intercolumnio de la nave central y la longitud del
mismo es, exactamente, el doble que la de los intercolumnios de
las naves laterales. El elemento más innovador de la iglesia
de san Ambrosio es que, probablemente, fue el primer ejemplo de
una bóveda nervada que ya en el gótico será
un elemento esencial para la cubrición de las iglesias.
Para contrarrestar el empuje de las bóvedas se construyo
la galería abovedada que sin embargo no sirvió para
este propósito y creo una sensación de oscuridad
en todo el templo.
Se construyó
a principios del siglo XI sobre una basílica anterior de
la que sólo se conserva la Torre de los Monjes, que data
de finales del siglo X.
La torre en
un principio estaba exenta pero luego se adosó a la iglesia.
La cabecera fue lo que primero se construyó, y lo más
típicamente lombardo. La torre datada en 1128 se sitúa
al noroccidente y se articula con listones decorativos y cornisas
resueltas con arcos de medio punto.
La organización
interior del templo es todavía muy paleocristiana. Tiene
un atrio, algo más tardío, con columnas muy clásicas.
Hay nichos muy profundos que darán lugar después
a la galería. Está construido en ladrillo y su decoración
es a base de bandas y arquillos.
La cubierta
en un principio sería de madera, pero en la segunda mitad
del siglo XI se cubriría con tramos de bóveda de
arista reforzada. Las otras dos naves estuvieron cubiertas desde
un principio con bóveda de arista. El presbiterio está
elevado, lo que indica la existencia de una cripta. Rezuma gran
clasicismo.
Abadía
de Pomposa
Era una abadía
cluniacense. Su iglesia tenía tres naves, divididas por
columnas de estilo muy clásico.
La nave central tenía una cubierta de madera. El presbiterio
estaba elevado sobre la cripta.
La iglesia
estaba precedida de un atrio en el que se juega con la policromía
de ladrillos de distintos tonos y la reutilización de materiales
de un edificio anterior. Tiene una torre muy esbelta divida en
varios cuerpos, con vanos que van aumentando según lo hace
la altura. Está decorada con bandas y arquillos.
Muchos de estos edificios tuvieron que ser remodelados y algunos
desaparecieron y no se volvieron a construir. Lo importante es
que el estilo lombardo se extendió a otros lugares, gracias
a los magister comacini.
La Torre de
la iglesia abacial de Sta. Maria es quizás el elemento
más destacado del conjunto. Este tipo de torres comenzaron
a darse en Ravenna ya en el siglo IX aunque fueran cilíndricas.
Sin embargo pronto se comenzó la versión rectilínea
y de varios pisos. La abadía de Ferrara no ejemplifica
bien este elemento de tradición bizantina y Lombarda. Data
de 1063 y en lo nueves pisos de su estructura aumentan de tamaño
las ventanas a partir de una hendidura hasta llegar a los cuatro
vanos en arcos del campanario. Es destacable que esta forma en
las torres no aparece en roma hasta 1100.
San
Miguel de Pavía
La iglesia
data de principios del siglo XII. En ella volvemos a ver los parámetros
establecidos en San Ambrosio. El arquitecto añade un transepto
con bóveda de medio cañón y además
eleva el coro para dar mayor sensación de ligereza. La
fachada se divide en tres zonas marcadamente verticales. Este
efecto lo consigue gracias a contrafuertes moldurados y una galería
de arquerías que corre bajo los aguilones, todo ello aderezado
con una serie de medios relieves sin ninguna estructura definida.
Las portadas laterales incluyen en sus arquivoltas diferentes
motivos vegetales y, en el dintel, un medallón con la figura
de Cristo.
Lo más
característico es su fachada de tipo "pantalla",
que es lo más común en Lombardía. En ella
se disponen una serie de contrafuertes que delimitan el espacio
creando calles que producen efectos claroscuristas y remata una
galería rampante en lo alto de la fachada. La escultura
está dispuesta no en el tímpano, sino en distintos
frisos por toda la fachada. Estos frisos rompen la verticalidad
que marcaban los contrafuertes, al igual que la galería.
Además,
la complejidad de la fachada aumenta gracias a distintos vanos
que se corresponden con las tres naves.
En Pavia también destacaron iglesias como la de San Pietro
in Ciel d´Oro de 1123 con una fachada que originariamente
tenia pórtico y las destruidas catedrales de Santa Maria
del Popolo y San Esteban. Son importantes igualmente las iglesias
de San Teodoro y San Lázaro.
Catedral
de Parma
Tiene una
primera consagración en el 1106, pero se tiene que reconstruir
prácticamente en su totalidad tras el terremoto de 1117.
Se alza sobre una plaza rectangular completada a la derecha por
el baptisterio al igual que en otras ciudades como Asti, Biella
o Cremona.
Tiene planta
cruciforme, con los brazos rematados en ábside que casi
forman parte de una cabecera trilobulada. Forma un conjunto en
el que aparece la catedral con una torre y el baptisterio aparte.
La fachada
parte del modelo de Pavía, pero en ella aparecen un número
mayor de galerías en dos pisos que forman unas efectos
aún más plásticos. Sin embargo, no hay contrafuertes
que marquen verticalidad.
Se proyectó
hacer dos torres a los lados, pero al final sólo se realizó
una con una zona superior ya gótica. La fachada tiene tres
portadas, la central protegida por un pequeño pórtico
soportado por dos columnas apoyo (algo que será muy común
en Lombardía y Emilia-Romagna).
El baptisterio
se construye en ladrillo y piedra entre los siglos XII y XIII,
por lo que tiene elementos góticos. Es posible que trabajara
en él Benedetto de Antelami. Se organiza en pisos que rompen
la verticalidad y que forman galerías adinteladas de un
gran clasicismo. Tiene contrafuertes que crean un cierto ritmo.
Sólo tiene un acceso, aunque los ocho lados tienen arcos
(en los demás ciegos). En el interior también se
juega con galerías y en cada uno de los 16 lados hay un
nicho cubierto con bóveda de horno. En el centro hay una
pila. En el interior hay arcos apuntados en la parte superior.
Todo el interior está decorado con pinturas que narran
la vida de Cristo y alusivas al bautismo. La cubierta es una cúpula
nervada, también con decoración pictórica.
San
Zenón de Verona
Se comenzó
hacia el año 1030, pero se hacen grandes reestructuraciones
y el edificio que vemos hoy es de entre 1133 y 1135. La iglesia
se advoca a San Zenón, el octavo obispo de Verona. Su tez
oscura tiene que ver con su origen africano. Murió en el
año 380 D.c. y fue enterrado en uno de los cementerios
fuera de las paredes de la ciudad de Verona romana. Es por eso
que la iglesia de San Zenón es ahora un poco fuera del
centro histórico.
Después
del terrible terremoto de 1117, la Basílica de San Zenón
se reconstruyó tal y como hoy la vemos. Al mismo tiempo,
junto a la iglesia se construyó un monasterio benedictino
de los más ricos en el norte de Italia, De la antigua abadía
en la actualidad siguen siendo una torre y el claustro que cerró
con un alza en una serie interrumpida de pequeñas columnas
dobles de mármol rojo de Verona. El material utilizado
es la toba volcánica, lo que da San Zenón su peculiar
parecido al color miel y la posibilidad de una ligereza que sólo
este tipo de material puede crear.
Está
recubierto con mármol bicolor en su exterior, que muestra
la relación con la Toscana. La fachada es algo diferente,
pero también relacionada con la Toscana. Deja ver las distintas
naves, hay una única portada con el pórtico encima
y un rosetón gótico.
También
tiene galería, pero no tiene la misma fuerza que en las
iglesias anteriores. Hay contrafuertes que marcan la verticalidad.
La escultura está fuera del tímpano, en la calle
central. Tiene una torre exenta en el lado oriental, al lado de
la cabecera, que está desmarcada de las torres lombardas
por su decoración exterior.
Es una iglesia
de planta basilical, con un ritmo de arcos geminados. La nave
central está cubierta con madera, mientras que las laterales
tienen bóvedas de aristas. La articulación del muro
es muy pobre, con un piso de arcadas y otro de ventanas en la
parte superior. La cabecera es gótica, con el presbiterio
en alto por la presencia de una cripta, que está cubierta
con bóveda de aristas.
En el centro
de la fachada de la ventana de color de rosa, también conocida
como la Rueda de la Fortuna, debido a las esculturas de maestro
de Brioloto que representan seis figuras humanas, el rey en la
parte superior y el hombre en la desesperación en su parte
inferior.
Catedral
de Módena
La Catedral
es obra de un mirabilis artifex llamado Lafranco que la inició
en 1099 no terminándose hasta 1184. Lo original de esta
iglesia era su aspecto fortificado sólo comparable en Italia
a las Catedrales de Ferrara o Cremona.
Módena
era una ciudad lombarda, pero estuvo bajo el poder de la condesa
Matilde. La iglesia estaba proyectada como una basílica
de tres naves y tres ábsides, sin crucero. Su arquitecto
parece que fue Lanfranco, y la planta está en relación
con iglesias de la Toscana como San Miniato.
Está
formada por cuatro grandes tramos cubiertos con bóvedas
capialzadas, con presencia de arcos geminados (interior lombardo).
El muro está dividido en tres pisos: arcadas, falsa tribuna
y ventanas, pero sin relación entre estos cuerpos. La cabecera,
elevada por una cripta inferior, tiene los ábsides semicirculares.
Las naves laterales está cubiertas por bóvedas de
aristas, pero sobre las tribunas, ya que entre las naves y la
tribuna no hay techo.
La fachada
está más en relación con la Toscana, adecuándose
a las tres naves del edificio, pero con galería y pórtico
sobre la portada principal. La galería continúa
en los laterales.
La Torre Girlendina,
que fue realizada entre el 1169 y el 1179, está decorada
con arquillos lombardos y dividida en cuerpos. Esta decoración
típica lombarda también aparece en los ábsides.
(Autora
del texto del artículo/colaboradora de ARTEGUIAS:
Ana Belén Fernández)