Monasterio
de Santa María de Mave (Palencia)
El magnífico
Monasterio benedictino de Santa María de Mave
se encuentra a tan solo 10 Kms. de la villa de Aguilar de Campoo.

Su
origen es un cenobio altomedieval del siglo IX, época de
la repoblación de la zona. Luego durante décadas perteneció
al Monasterio de Oña.
La construcción
actual data de tiempos en que fue posesión de doña
Sancha Ximénez, que lo recibió en préstamo
vitalicio del abad de Oña. Estamos en los últimos
años del siglo XII.
Actualmente
las dependencias del mismo han sido convertidas en una estupenda
posada rural llamada "El Convento de Mave", por lo que
los amantes del románico tienen aquí un buen punto
de arranque para numerosas rutas por la Montaña palentina.
Una curiosidad
de esta posada es que las instalaciones se adosan al muro sur de
la iglesia y desde alguno de sus pasillos se pude ver el interior
de la iglesia a través de un ventanal.

Queda en
perfecto estado de conservación su monumental iglesia románica.
Exterior
Cabecera
y cimborrio
La parte
más accesible visualmente de la iglesia es la del norte y
la del este, desde donde se tiene una buenísima vista de
su espectacular cabecera y cimborrio
Observamos la estructura de los tres ábsides de semitambor
escalonados, los brazos del transepto y sobre el crucero un cimborrio
de planta cuadrada con un vano de iluminación en cada cara.
Lo primero
que nos llama la atención es el color de la piedra arenisca
que se empleó para la construcción. Es de un color
rojo oscuro que alterna con otros tonos grisáceos. Nos recuerda
el color de muchas de las iglesias sorianas también construidas
con una arenisca similar.
La fábrica
es de grandes sillares que ayuda a realzar la notable monumentalidad
del edificio. En efecto, la ornamentación parece estar deliberadamente
suprimida, no sólo por la influencia cisterciense, sino para
mejorar el aspecto de nobleza.

Esta austeridad
se aprecia en la supresión de las habituales columnas entregas
del ábside, sustituidas aquí por contrafuertes escarpados.
Otra muestra de lo mismo es la articulación de los ventanales
con arcos abocinados de arista viva sin columnas, chambrana, etc.
Por su parte, los canecillos son geométricos y completamente
anicónicos.
Portada
La parte
más ornamentada es, sin duda, la puerta del hastial occidental.
Es muy característica y tiene relación con otras puertas
del entorno de Aguilar de Campo. Su superficie es de cierta frontalidad
y por tanto poco abocinada. El vano y las arquivoltas son apuntadas.
La primera y tercera llevan dientes se sierra, mientras que la segunda
y cuarta tienen relieves baquetonados.

También
compleja es la disposición de las columnas de apoyo que forman
una especie de zigzagueado saliente y entrante, hasta sumar un total
de ocho por lado. Se trata de columnas esbeltas y elegantes cuyos
capiteles -siguiendo el citado aire cisterciense- se asemejan a
los de Aguilar de Campoo y San Andrés de Arroyo, con cestas
de hojas vegetales horadadas con trépano y terminadas en
carnosos cogollos.
Interior
Una vez
en el interior del templo, apreciamos la amplitud de sus tres naves,
todas ellas abovedadas, dando de nuevo muestra de la maestría
arquitectónica de sus creadores.

Los soportes
de separación de dichas naves son de planta cruciforme con
cuatro semicolumnas embebidas en sus caras. Los arcos formeros son
apuntados.
La
sección cruciforme de los pilares estaba planteada para recibir
arcos fajones doblados, pero un replanteamiento se aprecia poco
antes de alcanzar la bóveda, simplificándolo y convirtiendo
la pilastra más semicolumna en una sola semicolumna que recibe
un fajón sencillo.
La bóveda
central es de medio cañón apuntado reforzada con los
fajones simples citados.
Una de las
características de esta iglesia de Santa María de
Mave es que las bóvedas laterales son de medio cañón
pero con eje perpendicular a la iglesia. No es, obviamente, una
solución exclusiva de este templo, pero no es precisamente
lo más habitual.
Los brazos
del transepto no sobresalen de los muros laterales y el crucero
está abovedado por una espectacular cúpula semiesférica
que es soportada por el cimborrio. El paso del cuadrado que forman
los arcos torales al octógono previo al círculo de
la cúpula se desarrolla aquí mediante trompas. Hay
que fijarse en el perfecto alineamiento concéntrico de los
sillares con que está construida la cúpula.

Por último,
diremos que los capiteles de las columnas estructurales de Santa
María de Mave, son prácticamente lisos. Sólo
muestran grandes hojas sin decorar de las que afloran unos frutos
gramíneos.
En el interior
se guarda una pila bautismal de perfil de cuba (no de cáliz)
que también es casi lisa.
Más interesante es el gran capitel románico que sirve
de soporte de la mesa del altar. No es originario de Santa María
de Mave sino del monasterio de Santa Eulalia de Villela. Rápidamente
nos percatamos que es un capitel antiguo, posiblemente del siglo
XI e imita lejanamente a las cestas corintias romanas pero sustituyendo
los acantos por hojas sencillas que terminan en esferas rugosas
tipo madroños.
Rutas
desde Santa María de Mave
Como
indicamos arriba, la posada del Convento de Mave permite la realización
de numerosas rutas por el románico norte palentino.
Sólo
citaremos aquí, por su inmediata proximidad las iglesias
de Pomar de Valdivia, Pozancos, Valdegama, y Becerril del Carpio.

La
iglesia de Pomar de Valdivia es gótica, pero se areprovechó
la puerta románica anterior.
las
iglesia de Valdegama y Pozancos son notables ejemplos del románico
rural palentino, por la calidad de sus cabeceras.

Notable
también es la famosa iglesia de San Vicente en Becerril del
Carpio (en el barrio de Puebla de San Vicente) que se conserva de
manera magnífica.
