La Iglesia de Sant Serni de Nagol se localiza
en la localidad de Nagol, perteneciente a la parroquia de San
Juan de Loria (Andorra) y data del siglo XI.
Esta fecha se conoce gracias al acta de consagración
de 1055 que se conserva en los Archivos Nacionales de Andorra.
Se trata de un pequeño templo de estilo románico
que, como rasgo singular, se localiza sobre una peña aprovechando
el relieve para su construcción. Desde el lugar se divisan
impresionantes vistas de los Pirineos.
El templo conserva sus elementos originales (si bien
con algunas dudas de su reconstrucción en época
moderna), a excepción del pórtico de la fachada
sur que fue construido posteriormente.
La iglesia es de pequeñas dimensiones, con
una única nave de planta rectangular con cubierta de madera
a dos aguas que se engarza a un ábside semicilíndrico.
El material constructivo se trata de sillarejos y mampostería
careada. Estas pequeñas piezas pétreas se colocaron
en hiladas aunque hay grandes áreas donde el aparejo es
muy irregular, lo que llevaría quizás a confirmar
posibles obras de reconstrucción postmedievales.
Exterior
Cabecera
Al
este se localiza el ábside de planta semicircular con dos
vanos de iluminación abocinados. A pesar del aspecto antiguo
de la iglesia de Sant Serni de Nagol no encontramos ni los arquillos
ni las lesenas lombardas propias del románico lombardo
pirenaico. Pero bien pudiera ser que las posibles reformas modernas
suprimieran estos elementos ornamentales.
Fachada occidental
A los pies de la nave se eleva el campanario de tipo
espadaña con extremo superior en ángulo, observándose
dos troneras alargadas coronadas con arcos de medio punto donde
irían ubicadas las campanas. Bajo ella se abre un ventanal
con forma de cruz, bastante frecuente en el románico lombardo.
Adosado a esta fachada occidental se encuentra el camposanto.
Pórtico moderno y puerta
La entrada al templo se realiza a través de
una puerta de con arco de medio punto en la fachada sur, donde
se observa un pórtico construido en época posterior.
Como ya ha quedado explicado, se ha planteado como
hipótesis una posible remodelación o algún
tipo de reformas del ábside, la nave y el pórtico
en los siglos XVII y XVIII, delimitándose también
en ese momento el espacio funerario.
Interior
El interior de la iglesia presenta un suelo de madera
que sustituyó al original excavado en la roca y de superficie
irregular que permaneció durante siglos. Encima de la nave
se construyó una cubierta de madera, aunque originalmente
pudo tener bóveda de medio cañón al haberse
conservado dos responsiones en los muros que actualmente no cumplen
ninguna función.
Pinturas murales
Una bóveda de cuarto de esfera cubre el ábside,
donde se ha conservado la mesa de altar original. Otra de medio
cañón lo hace con el estrecho tramo presbiterial
que mas bien parece un ancho arco triunfal. Es en el intradós
de dicho arco y en sus enjutas donde se ha conservado la mayor
parte de la decoración con pinturas murales al fresco que
fueron descubiertas en 1978.
Lo sorprendente es que sólo se ubiquen principalmente
en este arco triunfal pero no haya quedado nada en el interior
del propio ábside, quizás como consecuencia de las
posibles reformas ya indicadas que pudo sufrir la iglesia y, específicamente
la cabecera, entre los siglos XVII y XVIII.
Estas pinturas son muy interesantes por su aspecto
prerrománico, con los personajes pintados siguiendo más
las pautas de los beatos mozárabes (quizás el pintor
se inspiró en alguno) que en la pintura románica
de influencia bizantina que vemos en otras muchas iglesias andorranas.
Éste fue el motivo por el que tras su descubrimiento
fueron datadas en el siglo XI. Actualmente hay quienes opinan
que son posteriores -siglo XII o incluso el XIII- pero con un
claro carácter arcaizante.
En cuanto a la iconografía, resulta difícil
de interpretar ya que los elementos que se conservan aparecen
aislados.
En el centro, se situaría el Agnus Dei (Cordero
de Dios) inserto en un medallón y el resto de los elementos
harían referencias a santos y ángeles en actitud
de adoración.
En la enjuta izquierda (norte) aparece un ave en
probable alusión al Espíritu Santo y en la derecha
(norte) tenemos a San Miguel alanceando al dragón.
En la iglesia se conserva parte del mobiliario como
una pila bautismal de granito, el coro de madera barroco (s. XVII-XVIII)
y un retablo gótico (s. XV) dedicado a San Sernín,
pintado sobre tabla y con una organización en dos pisos
y tres calles.
Además, en el museo Espai Columba ubicado
en Santa Coloma de Andorra, a muy escasa distancia de la capital
del principado, Andorra la Vella, se conserva una cruz espinosa
procesional de madera policromada procedente de esta iglesia de
Sant Serni de Nagol.