Guía de la iglesia de Yela, Guadalajara
Introducción
Yela
es una localidad situada en la comarca de La Alcarria, en la provincia
de Guadalajara, al suroeste de importantes localidades como Alcolea
del Pinar y Sigüenza y justo en el medio entre las famosas
villas de Cifuentes y Jadraque.
El caserío se encuentra a la considerable
altitud de 1.168 metros sobre el nivel del mar.
Al igual que grandes territorios de la provincia
de Guadalajara (a excepción del Corredor del Henares entre
la capital y Madrid) se encuentra en la "España vaciada
o despoblada" y sólo tiene seis habitantes en su censo.

La iglesia de Nuestra Señora de los Llanos
de Yela
Lamentablemente, la buena iglesia de este
pueblecito de Yela que tiene la advocación de Nuestra
Señora de los Llanos fue víctima de las destrucciones
de la Guerra Civil Española, en la tristemente célebre
Batalla de Guadalajara de 1937.

Poco después se restauraría,
no sin licencias y libertades excesivas, por el Servicio Nacional
de Regiones Devastadas y Reparaciones.

Se encuentra cerrando por el lado norte la plaza
mayor de Yela, llamada Plaza de la Olma, por un ejemplar de este
árbol que hay a escasos metros del templo.

Sabemos que originalmente tenía una
nave con espadaña, presbiterio recto, ábside semicircular,
una hermosa galería porticada, aunque de diferente estructura
a la actual y una portada meridional que tenía arquivoltas
apuntadas sobre cuatro columnas con decoración vegetal.

De este conjunto primitivo, tras la destrucción
de la Guerra Civil y su parcial reconstrucción, sólo
se conserva la espadaña, la cabecera y el muro norte, pues
el resto de sus elementos arquitectónicos son modernos.
Aún así merece la pena describirlos por su belleza.

Galería porticada
La galería porticada neorrománica
tiene, en su costado meridional, un vano de ingreso sobre parejas
de columnillas con los fustes unidos, y cinco arcos a la izquierda
más otros seis a la derecha, sobre columnas geminadas con
capiteles campaniformes sin relieves tallados. Otros dos arcos
semejantes existen en el costado occidental de la galería.

Portada
La portada, muy diferente a la original, es
una emulación de la de Santa Clara de Molina de Aragón.
Es realmente vistosa y elegante. Se abre en un arimez rodeada
por columnas. Dispone de seis arquivoltas con finos baquetones
y puntas de diamante sobre seis pares de columnas con decoración
vegetal.

Cabecera románica
La cabecera posee el valor de lo verdadero,
aunque es más modesta que lo descrito hasta ahora. Se construyó
con mampostería (calicanto) y refuerzos de sillares. En
la actualidad, el ábside se semitambor se encuentra afeado
por los ya clásicos cables negros de electricidad y/o telefonía
que lo rodean completamente.

El tambor absidal tiene en su centro un estrecho
ventanal de doble arco, el interior decorado con entrelazos de
"ochos" y apoyado sobre columnillas con capiteles vegetales.

Actualmente, esta bonita ventana cerrada se
encuentra tras una reja de hierro que la protege pero también
dificulta su contemplación. Los canecillos son completamente
lisos.

En el muro norte, sin restaurar, permanecen
los restos de su antigua portada, ya cegada, con tres arquivoltas
aboceladas, sobre jambas y una pareja de columnas con capiteles
sencillos. Uno de ellos se adorna con doble orden de hojas.
En el interior, la nave se une al presbiterio
mediante dos sucesivos arcos triunfales grandes y con dobles arquivoltas
acusadamente apuntadas. Columnas con capiteles vegetales sirven
de apoyo. El presbiterio tiene bóveda de cañón
apuntada y el ábside de cuarto de esfera.