Fuentes
románicas
La afortunadamente creciente
valoración del patrimonio medieval que se vive en nuestros
días, está permitiendo conocer y recuperar algunos
tipos de construcciones que hasta hace poco pasaban desapercibidas.
Si fue la arquitectura
religiosa, la primera del mundo románico en ser puesta
en valor, poco a poco se recuperan y divulgan otros edificios
civiles y militares, que aunque menos numerosos, forman parte,
por derecho propio, de esa gran cultura románica.
Aquí
hablaremos sucintamente de la fuente románica. En el contexto
medieval el primer gran referente es la fuente prerrománica
de la Foncalada, erigida en Oviedo en tiempos de Alfonso III.
Esta construcción civil hay que relacionarla con la tradición
romana de uso público de las aguas, pero ya de forma cristianizada
y cargada de gran simbolismo, pues como se cita en las inscripciones
de esta fuente, las aguas purificadoras y curativas queda identificadas
con Jesucristo, invocado como "Salvs" . No es extraño
esta invocación pues, tradicionalmente, el agua manante
de pozos y fuentes naturales era considerado un don sagrado al
que, además, se le atribuía poder curativo.
Del periodo románico
se conservan algunas fuentes, aunque dada la sencillez de su arquitectura
y la falta de decoración de las mismas, es difícil
sin un estudio arqueológico específico, conocer
la verdadera datación de muchas de ellas. Nos viene a la
cabeza el caso parecido de las espadañas, con formas muy
sencillas y poco cambiantes desde la tiempos románicos
a siglos recientes y que llevan a confusión a numerosos
estudiosos.
Afortunadamente,
algunas fuentes conservan suficientes elementos que permiten tener
la certeza de su origen románico, entre ellas citaremos
las de Fresno de la Fuente (Segovia), Artaiz (Navarra) Ontiñena
(Huesca), Valdeande (Burgos) aunque ésta fue reformada
en el siglo XVIII.
La fuente románica
tipo es un pequeño edificio abovedado, de forma alargada,
con aspecto de templete por su remate triangular, abierta mediante
uno o dos arcos de medio punto, que cobija una piscina enlosada
-rectangular o circular- para remansar las aguas del manantial
donde se ubican.
En la bibliografía
sobre la arquitectura románica no hemos encontrado sino
breves referencias sobre estas construcciones y creemos que sería
interesante profundizar en el estudio de estos edificios del románico
civil, así como en su inventariado y datación.