Guía
del
Arte Románico en el Cerrato y los Alcores, Palencia
Las comarcas
de los Alcores y Cerrato constituyen, simplificadamente,
el sur y sureste de la provincia de Palencia (aunque esta
comarca excede los límites provinciales palentinos y alcanza
las de Valladolid y Burgos).

Esta comarca
está formada por mesetas rodeadas de valles con suaves
lomas como unión entre ambos.
Desde
el punto de vista artístico, en el Cerrato Palentino se
construyó un románico tardío, que incorpora
ya ciertas formas y estructuras que se pueden considerar propias
de la arquitectura gótica primitiva. Tal es el caso de
las iglesias de Santa María de Dueñas, Villaconancio
y Villamuriel de Cerrato.

No obstante, y dentro de este panorama, hay que salvar la excepción
del Monasterio de San Isidro de Dueñas (Monasterio
de la Trapa) cuya iglesia, aunque muy reformada, es de buena
época románica (último cuarto del siglo XI)
y muy relacionada con San Martín de Frómista. (VER
IMAGEN INFERIOR).
También
nos ocupamos en esta página de los modestos restos románicos
de la iglesia de Cevico Navero y el intersante y controvertido
templo de Valoria del Alcor.
En todo
caso y salvo en La Trapa, en el románico del Cerrato Palentino
sobresalen más los aspectos arquitectónicos que
los escultóricos.
Santa
María de Dueñas
Dueñas
es Conjunto Histórico Artístico y lugar de grandeza
y castellanía, con villas romanas en derredor y de recuerdos
del Cid, cuando Dueñas era señorío del Campeador.
La iglesia
de Santa María es del estilo que antes se llamaba románico
ojival, del siglo XIII.
Lo más
destacable es la cabecera donde se conservan dos ábsides
de los tres originales.
El central es poligonal y está sobreelevado para poder
soportar las bóvedas de crucería de la reforma gótica.
Aún conserva tres hermosos ventanales cegados que no estaría
mal recuperar, a base de finas arquivoltas de medio punto sobre
columnillas con capiteles vegetales.

La separación
de las calles o lienzos se hace mediante contrafuertes prismáticos
con escarpes.
El absidiolo
septentrional se conserva originalmente.
Es evidente
la relación de la cabecera de esta iglesia Santa María
de Dueñas con la del cercano Monasterio vallisoletano de
Palazuelos.
Monasterio
de San Isidro de Dueñas (Monasterio de la Trapa)
El Monasterio
de San Isidro de Dueñas fue fundado en el siglo X y en
tiempos de Alfonso VI adopta la reforma cluniacense. Parece que
de esta época (último cuarto del siglo XI) data
la actual iglesia, que aunque con reformas y "disfraces"
de otras épocas, conserva su estructura bastante bien.

Es casi
contemporánea y muy parecida a la iglesia del Monasterio
de San Martín de Frómista, por lo que es uno de
los edificios más antiguos del románico pleno español.
Lo
mejor conservado es el hastial occidental, donde se aprecia una
de las torres que lo flanqueaban y la portada que es típica
del románico del siglo XI, gracias a su juego alternante
de arquivoltas lisas y de baquetón
con guardapolvos ajedrezado.
Los capiteles están
tallados con primor, siendo tres de ellos vegetales y uno con
la famosa talla de la mujer con los pechos mordidos por serpientes.
Villaconancio
La iglesia
de San Julián de Villaconancio conserva una interesante
cabecera, con dos ábsides supervivientes, el central y
el del Evangelio.

El central
es más ancho y alto. Su decoración es muy original.
La cornisa se soluciona al modo zamorano, con arquillos sobre
ménsulas. Los muros se animan con pilastras acanaladas
que sirven de apoyo para cortas columnas. Mientras, los ventanales
muestran arquivoltas sucesivas aboceladas que rodean el vano sin
intermediación de impostas.
El absidiolo norte es también bastante curioso pues aunque
muy tardío, parece inspirarse lejanamente en la arquitectura
lombarda con arquillos murales que se apoyan en ménsulas,
o se prolongan en columnas, de forma alternante.
Hay que
recordar aquí que el románico del Valle del Esgueva
burgalés, hay al menos dos iglesias con una estructura
muraria similar, como es el caso de Pinillos de Esgueva y Santibáñez
de Esgueva. Esta comarca de Burgos se encuentra muy próxima
al Cerrato Palentino y Villaconancio en concreto.
Hay autores
que fechan esta cabecera a principios de siglo XII, sin detenerse
a pensar que el interior de estos ábsides llevan nervaduras
de refuerzo o que sus arcos triunfales son apuntados, lo que obliga
a reconsiderar una construcción de -como mínimo-
segunda mitad del siglo XII.
Cevico
Navero
La iglesia
parroquial de Cevico Navero era un templo de tres naves y tres
ábsides románicos.
Se conserva
apreciablemente bien la estructura interior de las naves con sus
respectivos soportes y arcos, además de uno de los ábsides.
Llama
especialmente la atención su puerta de ingreso que se encuentra
en el costado del norte.
La piedra
en que está construida, como ocurre en parte de las iglesias
de esta zona de Palencia y también en Valladolid es muy
blanda y frágil por lo que antes de la restauración
se encontraba muy erosionada y la decoración escultórica
bastante perdida.

Tiene
arquivoltas de medio punto y cuatro columnas con capiteles de
forma casi cúbica con motivos apenas descifrables. Los
canecillos del tejaroz han corrido parecida suerte.
Villamuriel
de Cerrato
La iglesia
de Villamuriel de Cerrato es un monumental templo de comienzos
del siglo XIII, con una concepción propia de lo que los
cistercienses construían por aquellos años.
Tiene
tres naves, cabecera de tres ábsides rectangulares, transepto,
y un airoso cimborrio octogonal sobre el crucero.
Todo el templo se muestra
jalonado por contrafuertes y los canecillos son anicónicos.

La fachada occidental
muestra una entrada muy original con dos arcos apuntados separados
por un grueso mainel. Encima había una arquería
mural, pero ahora bastante rota por un óculo del siglo
XVI. Más arriba, encontramos el auténtico rosetón
del siglo XIII.
A uno de los lados se
erigió una enorme torre de varios cuerpos románicos
menos el superior que es moderno.

La puerta norte es lo
más románico, junto con los ventanales, del templo.
Tiene cuatro arquivoltas de medio punto. La interior presenta
un perfil angrelado. En general, lo que vemos es, en gran medida,
fruto de una restauración reciente, pues se encontraba
muy deteriorada por la mala calidad de la piedra.
En el interior se aprecia
una arquitectura que a duras penas podemos llamar románica.
Los arcos apuntados de las bóvedas de crucería se
apoyan en pilares con dobles columnas en sus frentes con otras
acodilladas, al modo hispanolanguedociano.

En el crucero, los arcos
torales soportan el cimborrio octogonal mediante trompas.
Es obvio que estamos ante
un templo que ha superado el momento románico (aunque conserva
los ventanales y la puerta norte). Basta con echar un vistazo
al aspecto ortogonal y anguloso de muros y contrafuertes, que
ya han dejado de lado las redondeces románicas.
Valoria
del Alcor
Valoria del Alcor es un pueblo del suroeste de la provincia de
Palencia, ya muy próximo a la de Valladolid.

Su iglesia de San Fructuoso
es bastante conocida, no tanto por la calidad de su fábrica
románica, relativamente modesta, sino por la estructura
adosada al muro sur y que centra el mayor de los intereses y atractivos.

El templo propiamente
dicho presenta la habitual estructura del románico rural,
formada por una nave cubierta con bóveda de medio cañón
apuntado y una cabecera con ábside de planta semicircular.

En el muro norte se encuentra
la portada románica de cinco arquivoltas.

Lo más
sorprendente de la iglesia de San Fructuoso de Valoria del Alcor
es que, según recientes descubrimientos, la galería
porticada que se encuentra adosada, por el costado meridional,
al templo principal románico es una antigua iglesia prerrománica
(mozárabe) del siglo X, pues se han encontrado inscripciones
de esa época.

La puerta
cegada con columnas prerrománicas parecen confirmar esta
idea.

