Sahagún
y el origen del románico mudéjar de Castilla y León
Sahagún es una
histórica población de la provincia de León e
indiscutiblemente, una de las más destacadas escalas del Camino
de Santiago.
Aquí
existió uno de los más poderosos cenobios de la España
cristiana medieval: el Real Monasterio de San Benito.
Parece que su origen es altomedieval
y guardó las reliquias de los mártires Facundo y Primitivo.
Fue destruido en más de una ocasión y refundado en el
año 880 (en tiempos del rey asturiano Alfonso el Magno).
Durante los siglos fue ganando
poder hasta llegar a dominar sobre más de noventa monasterios
e iglesias, en época de Alfonso VI. De la construcción
románica y gótica de este monasterio no quedan sino
restos mínimos.
También es Sahagún
un lugar interesante porque se le considera uno de los focos primitivos
(incluso, probablemente el inicial) de ese nuevo arte mestizo exclusivamente
hispano que llamamos mudéjar, románico-mudéjar
o primer mudéjar castellanoleonés. El muro norte de
la Capilla de San Mancio y las iglesias de San Tirso y San Lorenzo
son buena prueba de ello.
San
Tirso
La iglesia de San Tirso de
Sahagún es muy importante pues se considera que fue una de
las primeras iglesias románicas españolas en que se
reemplaza la piedra y la escultura monumental por el ladrillo para
llegar a ser lo que se ha venido en denominar Románico-Mudéjar.
Parece que se inició
su edificación en las primeras décadas del siglo XII
en románico pétreo. De hecho, el ábside central
arrancó en sillería con columnas, pero cuando sólo
se habían levantado unas pocas hiladas hubo un cambio de planteamiento
y se continuó con ladrillo, de modo que las columnas de piedra
se continuaron como pilastras de ladrillo y el muro se decoró
con dos arquerías superpuestas de medio punto.
Los dos ábsides laterales se edificaron completamente con ladrillo
y su decoración se invierte con respecto al ensayado en el
central.
La torre que cabalga sobre
el tramo presbiterial del ábside principal es portentosa desde
el punto de vista arquitectónico. Es de planta rectangular
y sobre su primer cuerpo troncopiramidal se alzan otros tres más
con arquerías, teniendo los dos inferiores, columnas pétreas
como apoyos.
En el interior llama la atención
que el trazado de los arcos triunfales es de herradura.
San
Lorenzo
La iglesia de San Lorenzo
de Sahagún es otro magnífico ejemplar del románico
mudéjar, aunque ya en su fase "clásica" que
se extiende por toda la Tierra de Pinares castellana. Data de comienzos
del siglo XIII, como tantas construcciones de este estilo.
De grandes dimensiones, su
estructura es similar a San Tirso pero su material de construcción
es plenamente de ladrillo.
La cabecera tiene tres ábsides
con bellas arquerías de herradura y alfiz, con frisos de ladrillos
en esquinilla.
La enorme torre troncopiramidal
presenta cuatro cuerpos. El inferior tiene arcos ciegos, los dos superiores
presentan cuatro vanos con arcos doblados, y el último cinco
vanos rodeados de arco sencillo.
Sin duda este campanario inspiró
otras construidas en León y otras provincias castellano leonesas
como la de la iglesia segoviana de San Lorenzo.
Monasterio
de San Benito
Como
indicamos al principio, este monasterio fue especialmente protegido
por Alfonso VI que lo eligió como panteón. Fue uno de
los impulsores de la liturgia romana en contraposición del
rito hispánico visigodo y se convirtió en uno de los
más poderosos del noroeste de España durante los siglos
plenomedievales y ejerció su autoridad sobre inmensos territorios.
El Monasterio de San Benito,
ocupado por monjes cluniacienses, aunque nunca dependió jurisdiccionalmente
de Cluny, ejerció su poder como un verdadero señor feudal
a la francesa, lo que provocó numerosas revueltas en la ciudad.
A partir del siglo XV comienza
su declive y actualmente han llegado muy pocos restos del que debió
ser uno de los grandes monumentos medievales españoles. En
origen se trataría de un edificio del románico pleno
sustituido por otro gótico del siglo XIII.
Sí se ha conservado
aceptablemente la capilla de San Mancio que es un edificio
del siglo XII de una nave, adyacente a la iglesia abacial propiamente
dicha. El material es ladrillo y piedra de cantería y se conservan
bien el muro mudéjar del lado norte y capiteles vegetales de
los soportes, además de un ventanal en el testero.
También
hay que citar El Arco de San Benito, puerta sur de la iglesia
pero casi completamente modificada en el siglo XVII, y que hoy es
atravesada por una carretera.
La cara norte de este arco
conserva restos medievales, como arcos, óculos y columnas.
También sobrevive la
torre del reloj, que era una de las dos torres que flanqueaban la
entrada al monasterio.
En el Museo Arqueológico
Nacional de Madrid se conserva la magnífica Lauda Sepulcral
de Alfonso Ansúrez, procedente de este monasterio de San
Benito.
La
Peregrina
El famoso Santuario de la Virgen Peregrina es otro de
los monumento capitales de Sahagún, aunque en sentido estricto
se escapa del estilo románico.
Se encuentra al sur de la villa, sobre un cerro de mediana
altura Es la iglesia de un convento franciscano fundado en 1256 y
que sirvió como hospital de peregrinos, sirviendo a los viajeros
que atravesaban el Camino Francés en busca de Santiago de Compostela.
El edificio es amplio y austero, construido con ladrillos
con una nave de seis tramos separados por arcos diafragma que soportan
una techumbre de madera. La cabecera está abovedada con bóveda
de crucería de ladrillo.
Al ser bastante más moderno que los edificios
antes descritos, se aprecian ya formas góticas como el ábside
poligonal al exterior, aunque al interior tiende a ser semicircular.
La decoración es variada pero predominan las arquería
murales de arcos de herradura redondos y túmidos con frisos
de esquinillas. También hay polilobulados. Los ventanales son
bíforos, de medio punto, con un arco envolvente apuntado.
Otros
templos mudéjares medievales de Sahagún
En la capital del mudéjar
leonés, la nómina de edificios medievales del estilo
se amplía con el Santuario de la Peregrina y la Ermita
de la Virgen del Puente.
El Santurio de la Peregrina
fue una fundación franciscana del siglo XIII avanzado que fue
hospital de peregrinos. Se ubica en lo alto de una colina cercana
al núcleo de la población. Destaca su potente ábside
poligonal donde lo mudéjar se inspira más en el gótico
que el románico.
Mucho más humilde,
pero situado en un bonito paraje, es la Ermita de la Virgen del
Puente. Se llama
así porque está junto a un pequeño puente medieval
que salvaba el río Valderaduey (ahora seco y reconducido).
Se conserva de época
medieval la cabecera, que también es poligonal, con contrafuertes,
aspilleras y frisos de esquinilla
A 5,1 km de
Sahagún, se debe visitar el famoso Monasterio de San Pedro
de las Dueñas, otro notable edificio que se comenzó
en románico puro de piedra (como atestigua buena parte de su
cabecera) y se finalizó en ladrillo.
Además
de la arquitectura "mixta" de este cenobio femenino, lo
más destacado es su colección de capiteles interiores
de extraordinaria calidad.
Sin embargo, el más
famoso de todos no es el de mayor virtuosismo escultórico,
pero agrada por por su entrañable estampa. Nos referimos al
de las siete monjas.
Más
información del Monasterio
de San Pedro de las Dueñas