Románico
en Campoo y Valderredible
Geográficamente
la comarca de Campoo ocupa el extremo meridional de Cantabria
limitando al norte de las provincias de Palencia y Burgos. A su vez
se divide en municipios como Campoo Cabuérniga, Campo de de
Enmedio, Valdeolea, Valdeprado del Río, Valderredible, etc.
Esta extensa
comarca es una de las zonas de mayor concentración de románico
del norte peninsular.
Si bien hay
que decir su distribución es muy heterogénea, ya que
la mayoría de los edificios de esta época se concentran
en el centro (Campoo de Enmedio) así como en Valderredible
y Valdeolea, siendo muy escasos en el resto de la comarca.
Hacemos
aquí la advertencia de que hemos concentrado en esta página
los principales monumentos románicos de Reinosa, El Campoo
de Enmedio, Hermandad de Campoo de Suso, Valdeprado del Río
y Valderredible, dejando en otra específica los de Valdeolea.
Información
del Románico
de Valdeolea
Características
del románico en las las comarcas de Reinosa, Campoo de Enmedio,
Hermandad de Campoo de Suso y Valderredible
Desde el punto
de vista estilístico, el románico del Campoo comparte bastantes características
con el del norte de las provincias de Palencia y Burgos.
Junto con
templos rurales en paisajes de incomparable belleza también
existen iglesias románicas de noble factura.
Esta región
de Cantabria es altamente recomendada para los amantes del románico
y de quienes disfrutan de su visión en un ambiente paisajístico
rural.
Trataremos
aquí una pequeña pero significativa representación
del románico de esta zona de Cantabria:
De los Municipios de Reinosa, Campoo de Enmedio, Campoo
de Suso y Valdeprado del Río nos ocuparemos de las iglesias de San
Pedro de Cervatos (Colegiata), Santa María de Retortillo,
Bolmir, Villacantid, Fombellida, El Barruelo
de Carabeos y Aldea de Ebro.
De la zona del Valderredible, citaremos las iglesias
de Villanueva de la Nía, San Andrés y San Martín
de Valdelomar, Castrillo de Valdelomar y Quintanilla
de Rucandio.
Municipios de Reinosa, Campoo de Enmedio, Campoo
de Suso y Valdeprado del Río
En la zona centro de la comarca de Campoo, correspondientes
a los municipios de Reinosa, Campoo de Enmedio, Campoo de Suso y Valdeprado
del Río encontramos construcciones tan notables como la Colegiata
de San Pedro de Cervatos, las iglesias de Santa María de Retortillo,
Bolmir o Villacantid y otras mucho más modestas como Fombellida
y Aldea de Ebro.
Colegiata
de San Pedro de Cervatos
La colegiata de San Pedro de Cervatos es la joya románica,
junto a Elines, de toda la comarca cántabra del Campoo.
Fue fundada
inicialmente como el templo de un Monasterio, allá por la primera
mitad del siglo XII.
Este cenobio
tiene origen anterior, en el siglo X, posiblemente influido por la
importancia del paso entre las montañas de Cantabria y la Meseta.
El templo
es de serenas líneas románicas. De una nave rematada
en cabecera con elegante y alto ábside de semitambor.
A los pies
de yergue una elegante torre campanario con arquerías ciegas
sobre columnas y vanos geminados.
La portada,
de las mejores del románico cántabro, tiene varias arquivoltas
de perfecto medio punto y muy abocinadas que descansan sobre tres
pares de columnas.
También
posee tímpano y dintel labrado con filigranas vegetales y leones.
La profusión
escultórica de esta iglesia es algo excepcional.
Normalmente
toda la atención se centra en la consabida iconografía
erótica, donde se muestran escenas de coito o varios personajes
mostrando sus genitales.
La interpretación
de esta temática seguramente ha de interpretarse como una exaltación
de la capacidad de procreación humana o simplemente las costumbres
en su cruda y, al mismo tiempo, ingenua realidad.
No obstante
también hay que detenerse a contemplar toda el resto de escultura
de que manera desbordante se reparte por todo el templo.
Más
información de la Colegiata
de Cervatos
Santa
María de Retortillo
Sobre el foro de la ciudad romana de Julióbriga se edificó
la estupenda iglesia de Santa María de Retortillo.
Su estampa
es espectacular gracias a su buen nivel de conservación y el
precioso entorno paisajístico en el que la hallamos.
Sus aspectos
más interesantes son la espadaña del hastial occidental,
el tímpano empotrado en el muro meridional, su equilibrada
cabecera y los capiteles del arco triunfal.
Más
información de la Iglesia
de Santa María de Retortillo
Bolmir
Muy cerca
de Retortillo está Bolmir con su simpática iglesia.
De pequeñas proporciones, es interesante por su cabecera, espadaña,
portada meridional y la gran colección de canecillos de temática
costumbrista y erótica explícita que nos muestra.
El interior es sencillo, si bien conserva la cabecera
en buen estado. En el centro del ábside hay un ventanal cuyos
capiteles muestran animales (dos leones y un ave) un tanto mutilados.
Por su parte, los capiteles del arco triunfal muestran de nuevo similitudes
con Cervatos: leones de cabeza común y acantos escalonados
rematados en volutas.
Villacantid
Villacantid es una población al oeste de
Reinosa cuya iglesia sufrió importantes reconstrucciones postmedievales
hasta el punto de que su puerta de ingreso se encuentra en el muro
oriental de una de las nuevas naves que se construyeron, lo que provoca
la inusitada estampa de poder contemplar, en el mismo plano, el ábside
y la citada portada románica.
Este notable ábside, pequeño pero perfectamente
construido, cuenta con dos dobles columnas y un gran ventanal en el
paño del medio. Son apreciables los capiteles de este ventanal
y los capiteles de las columnas entregas.
En cuanto a la puerta, hay que decir que debió
construirse en el muro meridional del templo románico primitivo,
pero cuando se acometió el ensanche del edificio se desmontó
y se volvió a construir en el muro de cierre del este de la
nave sur. Al menos este elemento tardorrománico apreciable
no se perdió irremisiblemente.
Cuenta con arquivoltas apuntadas y una pareja de columnas.
En la actualidad
y desde 2005 se instalado en esta iglesia desacralizada el Centro
de Interpretación del Románico
Más
información de Centro
de Interpretación del Románico, Villacantid
Fombellida
No muy lejos de San Pedro de Cervatos encontramos la población
de Fombellida y su templo de origen románico junto a la carretera.
Se trata de
un edificio muy modesto aunque la cabecera que hallamos está
edificado con sillería cuidada y bien montada.
Aldea
de Ebro
La iglesia de Aldea de Ebro tiene un templo curiosos por algunas circunstancias.
La primera
es contar con una enorme espadaña exenta al costado oriental
del propio templo. Llama la atención la desproporción
de tamaños entre este elemento auxiliar que sirve "tan
sólo" para albergar las campanas y la recoleta iglesia
a la que presta servicio.
El otros aspecto
que resulta un tanto especial es el tipo de cabecera de muro de cierro
plano y no semicircular. No obstante, en toda esta comarca hay otros
edificios románicos con testero recto.
El
Barruelo de Carabeos
En el Barruelo de Carabeos tenemos otra iglesia que, aunque muy adulterada,
tuvo cabecera plana de la que se conserva su pequeño ventanal
en el muro de cierre.
Mejor se ha
conservado la bonita puerta del costado sur. Se abre en un ancho arimez
y cuenta con cuatro arquivoltas de medio punto. La exterior es muy
original pues en cada dovela se talló un relieve de un aspa
con botón central.
Una de las
curiosidades de esta portada es que en una de las arquivoltas aparece
una fecha de consagración correspondiente a una fecha tan tardía
como 1264.
Las columnas llevan capiteles con volutas figuras geométricas
muy esquemáticas y una pareja de animales enfrentados y rampantes.
El Románico en el Valle de Valderredible
De todas las
zonas de la Comarca de Campoo, la que más contenido románico
tiene es, sin duda, el precioso valle por donde circula el joven río
Ebro, llamado Valle de Valderredible.
San
Andrés de Valdelomar
Tomando la
carretera CA-273 que une la zona de Aguilar de Campoo con tierras
burgalesas (y poblaciones con interesante románico como Escalada)
recorremos la zona meridional de Valderredible, un verdadero vergel
de románico y de ermitas rupestres prerrománicas.
Uno de los
primeros pueblos con los que nos topamos es San Andrés de
Valdelomar con espadaña románica y recia cabecera
de sillería con ventanal de buenos capiteles.
San Martín de Valdelomar
A
muy escasa distancia de San Andrés de Valdelomar nos encontramos
con otra nueva aldea: San Martín de Valdelomar.
Su pequeña
iglesia perteneciente al románico tardío y austero del
siglo XIII.
Tiene también
una espadaña románica y una cabecera con estribos y
ventanal central cuyas columnas muestran de capiteles vegetales muy
sencillos. (VER IMAGEN LATERAL)
Castrillo
de Valdelomar
Siguiendo la carretera CA-273 llegamos a Castrillo de
Valdelomar al oeste del municipio de Valderredible. Su bonita iglesia
románica se encuentra al costado norte de la aldea, encaramada
en el cerrete que domina el pequeño caserío.
El lugar donde se construyó no puede ser más
bonito, sobre lo alto de una pequeña loma a cuya vertiente
norte se expande un valle repleto de robles. Los amantes de la fotografía
encontrarán innumerables ángulos para perpetuar con
sus cámaras tan bello ejemplar de la arquitectura tardorrománica
cántabra.
Construida con sus cimientos excavados sobre un promontorio
rocoso, este sencillo templo cuenta de tiempos románicos con
cabecera, espadaña, el exterior de la nave y una puerta en
el muro meridional. Todo ello muy sencillo, incluso elemental, pero
no por ello deja de ser un monumento importante y entrañable.
El ábside tiene un ventanal en el centro con arquivolta
sobre columnas, cuyos capiteles, muy esquemáticos, muestran
una planta con hojas romboidales y una pareja de animales: serpiente
y anfibio.
El cuerpo de la nave, aunque con reformas, es básicamente
el original como certifica su coronamiento con canecillos de proa
de barco.
La puerta se abrió en el muro sur, cobijada por
un tejado construido entre la nave y el campanario exento. Sus arquivoltas
son planas y apuntadas, de gran sobriedad, y los apoyos son las jambas
y una pareja de columnas con capiteles vegetales similares en labra
a los del ventanal del ábside. También tiene tímpano
aunque no aparece escultura alguna.
La potente torre que protagoniza el conjunto, exenta
del resto de la fábrica hacia el sur, es fruto de una reconversión
de la espadaña románica en fechas postmedievales. Al
comienzo tendría tres troneras y forma triangular, hermanada
en estructura con las conservadas en localidades vecinas, pero fue
rebajada y completada con otros tres muros perimetrales para convertirla
en auténtica torre.
El interior continúa con la tónica de minimalismo
arquitectónico y escultórico del exterior. La cabecera
está compartimentada en presbiterio y ábside abovedados
como es norma y los capiteles de las columnas del arco triunfal vuelven
al repertorio vegetal conocido.
La iglesia de Santa Leocadia de Castrillo de Valdelomar,
por las características formales de la escultura descrita,
parece ser obra muy tardía de avanzado el siglo XIII.
Otro de los alicientes de esta iglesia es que alrededor
se conserva una necrópolis altomedieval con tumbas antropomorfas
excavadas en la roca. La mayoría se encuentran a los pies del
templo.
En definitiva, esta sencilla y pintoresca iglesia
del occidente de Valderredible, junto a los preciosos paisajes circundantes
son de tal hermosura que cuesta trabajo abandonar este mágico
lugar.
Villanueva
de la Nía
A poca distancia
está Villanueva de la Nía, con un interesante templo
románico. Además de la habitual espadaña románica
de punta aguda y troneras, presenta la característica de tener
una buena colección de canecillos figurados en el alero.
La mayoría
de la figuras representan curiosos motivos geométricos, pero
también los hay con esculturas de personajes humanos.
San
Martín de Elines
Siguiendo
por la misma carretera en dirección a Escalada (Burgos) marchando
paralelos al Ebro por el verde Valderredible encajado entre grandes
muros y farallones calizos, alcanzamos San Martín de Elines.
La emocionante ruta tiene
su colofón cuando tras una curva emerge, casi sin advertencia,
la estampa soberbia de la cabecera de la iglesia monástica.
La iglesia de San Martín
de Elines, inicialmente perteneció a un monasterio, luego pasó
a ser colegiata y más tarde parroquia.
La cabecera es imponente gracias
a los grandes arcos que rodean las ventanas y que dan un estupendo
ritmo al ábside de semitambor.
También el interior
sobresale por sus arquerías murales y la riqueza escultórica,
donde sobresale la figura del león.
Más
información de la Colegiata de San Martín de Elines
Quintanilla
de Rucandio
En
un paraje encantandor aparece la iglesia de Santa María de
Quintanilla de Rucandio.
Esta pequeña
iglesia nos ofrece un muy bien proporcionado ábside de sillería,
con columnas entregas y ventanal.
Sin embargo,
si por algo es conocido este templo románico del Valderredible
es por el tímpano de una puerta desaparecida que se encuentra
empotrada en uno de los muros. Es de forma apuntada y muestra la escena
de la Adoración de los Reyes Magos. La piedra se encuentra
erosionado frontalmente, pero, a pesar de ello, se aprecia una elegante
movilidad de los personajes y calidad en el modelado.