Santillana del Mar
es una de las poblaciones más turísticas del Cantabria
y de todo el norte de España.
Estas tierras estuvieron pobladas
desde tiempo inmemorial, como demuestran las pinturas de la "Capilla
Sixtina" del Paleolítico, es decir las Cuevas de Altamira.
También se han hallados muestras de que en época romana
el lugar estaba habitado.
Sin
embargo la causa del auge de Santillana del Mar como importante población,
proviene de un antiguo monasterio que nació en los siglos altomedievales
para custodiar las reliquias de Santa Juliana. Según la tradición,
los restos de esta mártir cristiana de Asia Menor de tiempos
del emperador Diocleciano llegaron a Cantabria tras un largo y complejo
peregrinar.
Este Monasterio benedictino
se convertiría en Colegiata en el siglo XII, haciéndose
cargo canónigos de San Agustín.
En el siglo XV, la Casa de
los Mendoza convierte Santillana en un villa de acentuado carácter
señorial, con gran riqueza de palacios residenciales y casa
señoriales.
Santillana del Mar es, en
definitiva, un lugar de incomparable belleza, que parece congelado
en el tiempo hace unos cuantos siglos.
Colegiata
de Santillana del Mar
Como hemos
indicado, en este lugar de Santillana del Mar existió un monasterio
desde siglos altomedievales para albergar las reliquias de Santa Juliana.
Luego pasó
a ser colegiata y ya en el siglo XII se comenzó a construir
el complejo religioso que hoy se ve, aunque no se libró de
las habituales reformas posteriores.
La iglesia
tiene tres naves con crucero e impresionante cabecera de tres ábsides
escalonados.
Esta
cabecera es de lo más hermoso, no sólo del románico
de Cantabria sino de toda España. Además de las columnas
entregas, destacan los grandes y elegantes ventanales rodeados de
múltiples arquivoltas.
Desde el punto
de vista escultórico, la amplia colección de capiteles
y canecillos muestran un repertorio rico de calidad e iconografía.
En el transepto
se levanta un cimborrio de planta cuadrada y arquerías murales
sobre columnas.
Otra torre
de aspecto más macizo se alza a los pies.
La puerta
meridional, aunque adulterada, es de grandes arquivoltas de medio
punto sobre columnas. Encima de la misma hay una gran colección
de estatuas románicas reubicadas.
Un elemento
de gran belleza es el claustro románico construido en el costado
septentrional.
Consta de tres alas, pues la oriental fue reconstruida. Los arcos
son semicirculares y apoyan sobre parejas de columnas de corto fuste
y capiteles voluminosos que forman una sola pieza.
Son todos
ellos de hermosa plástica. Dos elementos sobresalen especialmente
en este claustro. Por un lado, las cestas de entrelazos y por otro,
las escenas que incluyen ángeles. En pocos lugares como en
el claustro de Santillana del Mar estos seres tuvieron tal protagonismo.
Pinche
para ver nuestro Vídeo sobre
"Las Colegiatas de Cantabria"
Románico
en los alrededores de Santillana del Mar
Aunque el
románico no abunda en este sector de Cantabria, no podemos
evitar citar aquí dos poblaciones muy cercanas a Santillana
del Mar, hacia el sureste, en dirección a Torrelavega.
Uno de estos
pueblos es Viveda. Esta aldea de Viveda está sólo
a 3 Km. de Santillana. Su iglesia de San Salvador conserva una sencilla
portada de dos arquivoltas y guardapolvos ajedrezado y pareja de columnas
encapiteladas. Más interesante aún es la lápida
fundacional del muro que nos habla del año 928, por lo que
estos restos románicos tuvieron una antecesora iglesia prerrománica.
Muy Cerca
de Viveda y a tan solo 8 km. De Santillana del Mar está el
pueblo de Polanco. Por algunas fotos se sabe que tuvo una preciosa
portada de varias arquivoltas y columnas. Interesaba su arquivolta
angrelada interior que es un caso único en Cantabria. Lamentablemente
fue destruida en 1936 junto con el resto de la iglesia y el edificio
actual es un anodino edificio de los años 40.